La terapia de neurodesarrollo está orientada a favorecer la adquisición de habilidades motoras, cognitivas, sensoriales y socioemocionales en niños que presentan retrasos o condiciones específicas del desarrollo.

Se parte de una valoración inicial que permite establecer metas claras, realistas y medibles, siempre diseñadas en conjunto con la familia. El tratamiento se adapta a la etapa evolutiva del niño, asegurando intervenciones lúdicas y efectivas.

El objetivo final es que el niño logre mayor independencia y confianza, alcanzando hitos de desarrollo que le permitan integrarse mejor en la escuela, la familia y su comunidad.